miércoles, 17 de septiembre de 2014

Reseña: Tiempo de sembrar piedras, de Tim Powers

SINOPSIS: Consagrado como el padre del steampunk y reconocido internacionalmente por sus apasionantes novelas de fantasía histórica, Powers ha cultivado el formato corto en contadas ocasiones. Esta recopilación recoge los mejores relatos de su dilatada carrera profesional y presenta facetas tan atípicas como memorables del autor de En costas extrañas, Las puertas de Anubis y La fuerza de su mirada, entre otras novelas.
Esta antología recoge los siguientes relatos de Powers: Dondequiera que se oculten, Un alma embotellada, El camino de bajada, El reparador de biblias, Salvación y destrucción, y la novela corta Tiempo de sembrar piedras.

RESEÑA: Esta antología de relatos cortos ha sido mi primera aproximación a Tim Powers, un autor con casi cuarenta años de carrera a sus espaldas y uno de los creadores del género steampunk allá por la década de los ochenta. Toda una institución dentro de la literatura fantástica, vamos, y que como muchos recordaréis hace algo menos de dos meses visitó nuestro país en la última edición del festival Celsius 232 de Avilés.
En esta recopilación de relatos publicada por Gigamesh nos encontramos con una serie de relato de temática más propia de la ciencia ficción, pero eso sí, siempre con la particular visión del mundo de Tim Powers. Debo reconocer que cuando tuve en mis manos esta antología y sabiendo que estaba formada por relatos breves decidí que iría administrando su lectura con cuentagotas... pero lo cierto es que la prosa y la forma de desarrollar la trama del norteamericano me atrapó desde la primera página y cuando me dí cuenta ya me había leído los tres primeros relatos de una sentada. El resto no tardó mucho en seguirlos.
Y es que Powers tiene la habilidad de enganchar al lector a lo que cuenta con una rápida presentación cargada de enigmas que hace que te preguntes que está sucediendo. En la mayoría de estas historias nos encontraremos tan perdidos como los propios protagonistas, personas corrientes que de pronto se topan con una realidad diferente a la normal.
Aunque los relatos comparten algunos elementos temáticos (como los viajes en el tiempo o las almas atrapadas después de la muerte) son bastante variados, pero en todos Powers nos demuestra su maestría a la hora de jugar con el orden lógico de los sucesos que narra, y siempre guardándose un as en la manga para sorpresa final del arrobado lector.
En Dondequiera que se oculten Powers nos embarca en los intentos de un hombre por reescribir la historia gracias a su capacidad de saltar en el tiempo, por breves periodos. Pero su buenas intenciones para hacer desaparecer de la historia americana sus momentos más oscuros (como la guerra de Vietnam o la presidencia de Nixon) no tendrán los efectos que esperaba y acabará enfrentándose con una criatura salidad de las pesadillas más surrealistas.
Un alma embotellada probablemente sea el mejor relato de toda la antología, o al menos el que más he disfrutado (y eso que el resto no son precisamente malos). Con esta historia no es difícil adivinar el amor de Tim Power por la libros, la poesía y el poder de la escritura. El americano nos presenta una historia muy potente sobre el poder intemporal de la escritura, el amor a través del tiempo y un alma capaz de persistir después de la muerte gracias a la magia de la poesía.
El camino de bajada nos presenta una particular reunión social: un grupo de 'reencarnados', almas capaces de cambiar de cuerpo cada vez que fallecen, alargando sus vidas a través de los siglos expulsando el alma de bebes no natos de sus cuerpos. Alguno de estos 'vampiros del alma' no se mostrará de acuerdo con los planes del resto de sus inmortales e inmorales compañeros de existencia.
En El reparador de biblias conocemos a un experto en la recuperación de almas robadas, un hombre acabado que no tiene nada por lo que vivir o morir, pero que gracias a la visita de un desconocido tendrá una opción de redimirse.
Salvación y destrucción es otro de los relatos de la antología que recomiendo encarecidamente a todo aquel que no conozca a Tim Powers. Una magnífica y absorvente historia de un buscador de ediciones antiguas y raras que se topa con el misterio de un poema sumerio que puede poner en peligro la existencia de toda la humanidad. Un relato con tintes casi 'lovecraftianos' gracias a la presencia de ese ancestral poema que vuelve locos a aquellos que intentan traducirlo, y que Powers mezcla con buena mano con la California de la década de los 50 y su generación de poetas beats (Kerouac, Ginsberg..).
Por el último nos encontramos con la novela corta que da nombre a la antología, Tiempo de sembrar piedras. Esta historia sirve de enlace entre la novela de Powers La fuerza de su mirada y la nueva publicación de Gigamesh Ocúltame entre las tumbas. En esta historia nos encontramos con Edward Trelawny, un aventurero inglés envuelto en la guerra de la independencia griega de comienzos del siglo XIX que lo lleva a tener que plantar cara a una amenaza mucho más antigua: la de los ancestrales y peligrosos nefilim. Como en las dos novelas anteriormente citadas, Powers mezcla su historia llena de elementos mágicos con la historia real y personajes verdaderos como el propio Trelawny, o los poetas Byron y Shelley.
Esta antología es una lectura rápida (los relatos son bastante breves con la excepción de Salvación y destrucción y la novela corta Tiempo de sembrar piedras), además de absorbente. El buen hacer de Tim Powers con las palabras hace que sea casi imposible no saltar de un relato al siguiente sin parar, y convierten su antología en un placer para el lector que se quiera dejar llevar a un mundo imaginativo y sorprendente.
Por último no quiero olvidar señalar, una vez más, la excelente ilustración de portada obra de Enrique Corominas. El genial ilustrador ha escogido un momento de la novela corta Tiempo de sembrar piedras para crear otra de esas portadas que atrapan la atención de cualquier cazador de novedades literarias.

FICHA
Tiempo de sembrar piedras
Tim Powers
Ediciones Gigamesh
208 páginas
16 euros

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